En una gota de lluvia,
todo el dolor, el beso
desabrido de un aire sin retorno,
como ausencias de otoño,
melancólicos cantos
de héroes vencidos.
En una gota de lluvia,
la devastación; la belleza,
por otra parte, de una calandria
solitaria contra el añil
de la mañana, que se despereza
en una arboleda,
entre lirios de fuego,
como el sol que acaba de nacer.
En una gota de lluvia,
el polvo del sendero, un mapa
desleído y mudo,
la tierra incógnita del atardecer.
Fernando Alda
No hay comentarios:
Publicar un comentario